viernes, 9 de diciembre de 2011

La energía creativa del automóvil

Audi Urban Future Summit from onlab on Vimeo.

Uno de los principales transformadores de las ciudades del siglo XX ha sido el automóvil, que además va a seguir siéndolo sin duda en la primera parte del XXI. No entraré a exponer sobre el papel del coche en las Smart Cities, sino sobre la aproximación que hace uno de los primeros fabricantes del mundo al concepto de ciudad del futuro.

Audi, más allá de preocuparse por la evolución de los automóviles en si mismos, se aproxima a los vehículos en el nuevo entorno urbano y las transformaciones en las energías, o mejor dicho las energías con capacidad de transformación en el entorno.
La energía de los datos, la de las relaciones sociales y la de los recursos son los ejes sobre los que debatieron en Nueva York expertos en diversas materias bajo el auspicio de Audi. http://www.audi-urban-future-initiative.com/en/summit/programm.html.

Dentro de este amplio proyecto lanzado por el fabricante alemán, hay un espacio dedicado a la investigación sociológica dirigido por la profesora Saskia Sassen de la Universidad de Columbia, bajo el título Urbanizing Technology. Saskia Sassen se ha dedicado desde los años 90 a estudiar la transformación de la ciudad, su papel en el mundo global y las nuevas tecnologías.

Frente a las posiciones de las compañías tecnológicas que apuestan por la sensorización de la ciudad y su digitalización, la profesora Sassen introduce el concepto Open Source llevado al urbanismo http://www.domusweb.it/en/op-ed/open-source-urbanism/. Esta reutilización del concepto parte de la aplicación personalizada de los ciudadanos de las tecnologías, y en el caso de una ciudad, el resultado puede ser bastante diferente de lo que los diseñadores esperan. Esto es lo que hace una ciudad viva y abierta.

En su artículo para mckinseydigital.com remarca que el reto no es construir nuevas ciudades inteligentes de la nada por 30 o 60 billones de dólares, sino poner al servicio de los ciudadanos toda esta tecnología disponible. Algunas de estas ciudades se convierten en un showroom tecnológico o un laboratorio donde experimentar soluciones presentes y futuras, sin más objetivo ni fin que el reto o la exhibición.

En línea con las propuestas de Saskia Sassen, no hay mayor reto que urbanizar la tecnología y transformarla en servicios que cuenten con el ciudadano. Si hacemos caso de Steve Jobs, no hay que preguntarle al cliente o al usuario por sus preferencias o necesidades a la hora de lanzar un producto o un servicio, pero al final, el ciudadano soberano descartará todo aquello que no le proponga una mejora de sus condiciones de vida.

No obstante, en Audi son conscientes que el futuro está en nuestra imaginación y solo participando en ese ejercicio creativo podrán inventar nuevas formas de utilizar el automóvil y diseñarlo para que se adapte al conductor.


Artículo de José Luis Cobas para Infraestructuras Inteligentes.