El proyecto Vogadors de
Jordi Badia y Félix Arranz, ganador del concurso para representar
Catalunya y Illes Balears en la Bienal de Arquitectura de Venecia.
Vogadors /
Architectural Rowers destaca la importancia de una arquitectura austera
basada en el respeto al entorno y a los usuarios. Para desarrollarlo,
Jordi Badia y Félix Arranz cogen como punto de partida una frase de
Jorge Oteiza:
"Quien
avanza creando algo nuevo, lo hace como un remero, avanzando hacia
adelante, pero remando de espaldas, mirando atrás, hacia el pasado,
hacia lo existente para poder reinventar sus claves"
El objetivo es mostrar que este tipo de arquitectura no es únicamente la respuesta automática a una situación de crisis económica, sino que se trata de una tendencia cultural y estética que entronca con toda una tradición de la arquitectura catalana y balear, que se ha mantenido incluso cuando el contexto internacional pedía caminos formales y expresivos. Conecta también con tendencias internacionales que ya avisaban los excesos de algunas arquitecturas de los últimos años. Ahora se reconoce la idoneidad gracias al contexto de sensibilidad contemporánea fruto de la actual situación económica y ecológica. Al mismo tiempo, se quiere fomentar el debate internacional sobre esta tendencia, e integrar Catalunya y Balears, como uno de los centros de producción cultural e intelectual de una arquitectura plenamente contemporánea.
Para la 13a edición de esta Bienal, que tendrà lugar entre el 29 de agosto y el 25 de noviembre de 2012, la dirección del evento ha designado como comisario al prestigioso arquitecto David Chipperfield. El tema de este año es Common Ground, propuesto por Chipperfield con el objetivo de homenajear una cultura arquitectónica vital e internacional que se interroga sobre los territorios comunes, intelectuales y físicos. El comisario quiere también que los proyectos participantes reflejen las preocupaciones, influencias e intenciones que comparten loes estudios de arquitectos a nivel internacional.
L’Institut Ramon Llull, consciente de la importancia y la proyección internacional de este evento, será presente en representación de Catalunya y Baleares para dar soporte a la arquitectura de estos territorios, en un momento de difícil coyuntura para el sector. La propuesta de l’Institut Ramon Llull será presentada en el marco de los Eventi Collaterali de la Bienal de Arquitectura de Venecia.