El jurado del V Premio de Arquitectura BigMat, presidido por el arquitecto Jesús Aparicio, ha decidido otorgar por unanimidad el primer premio del certamen 2011 al Conjunto MUCAB -Museo, Escuela de de Música, Centro de Desarrollo Local, de la Mujer, Guardería, Aparcamiento y Cafetería en el Municipio de Blanca (Murcia)-, del arquitecto Martín Lejárraga que ha conseguido crear un nucleo de representatividad local, desde el que se crea una nueva tensión urbana que busca potenciar la actividad junto al entorno del río Segura.
El edificio de “Laboratorios y Almacenes de Reciclado Químico de la Universidad de Alcalá”, presentado por el arquitecto Héctor Fernández Elorza ha merecido el segundo premio, mientras que el tercero ha recaído en la Sede del Servicio Municipal de Medio Ambiente en las Riberas del Ebro (Zaragoza), de los arquitectos Jaime Magén y Francisco Javier Magén.
Los Premios BigMat de Arquitectura pretenden distinguir los proyectos arquitectónicos españoles más destacados y fomentar el prestigio nacional e internacional de nuestros profesionales. Están dirigido a los profesionales encargados del diseño de obras de construcción que hayan desarrollado su proyecto desde diciembre de 2005 habiendo tenido en cuenta la integración urbana y las nuevas necesidades de la sociedad de hoy en día, dentro de la arquitectura interior y exterior del edificio.
A la presente edición de los premios se han presentado casi un centenar de propuestas, provenientes de toda la geografía española, tanto insular como peninsular y con unas arquitecturas que abarcan todo tipo de funciones, desde centros médicos rurales, hasta aeropuertos, pasando por viviendas, edificios institucionales, hoteles, casinos, escuelas, centros de recogidas de residuos, paseos marítimos, piscinas, bibliotecas, etc… En resumen, edificios de toda procedencia y todo tipo de uso.
Jesús Aparicio, presidente del jurado, destaca la difícil tarea que ha supuesto la selección de los tres finalistas debido al gran número de proyectos presentados y a la gran calidad de muchos de los proyectos que han tenido que quedarse en el camino, tras intensas deliberaciones del jurado.
Los proyectos ganadores
El Conjunto proyectado por Martín Lejárraga es una actuación que va más allá de la estricta edificación, ya que el MUCAB supone un nuevo lugar de concentración social que propicia un nuevo espacio público y social a través del edificio y su entorno. Junto al río, se prolonga la intervención desde las áreas colindantes al edificio hasta la plaza anexa, unificando pavimentos y criterios de actuación, estableciendo nuevas conexiones, facilitando la accesibilidad, y potenciando el entorno en el que se interviene. Se establece así un sistema de actuación que conjuga lo urbano con lo edificatorio, teniendo como objetivos primordiales el trazado de la ribera del río, establecer nuevas conexiones, facilitar la accesibilidad, y la potenciación del entorno en el que se interviene.
Es de destacar la dificultad proyectual que supone el hecho de que el edificio concentre usos muy diversos, unos usos que acertadamente se agrupan en tres paquetes programáticos conectados por patios. Cada uno de ellos funciona tanto de manera independiente, como comunicándose entre ellos, permitiendo el solape de programas, la comunicación visual y su ocupación temporal. De esta manera el MUCAB se convierte en lugar de conexión para todos los extractos sociales de la localidad, desde su construcción, geometría, estructura y programa.
El proyecto de “Laboratorios y Almacenes de Reciclado Químico de la Universidad de Alcalá”, presentado por el arquitecto Héctor Fernández Elorza, demuestra cómo el residuo ordenado y clasificado puede ser una nueva oportunidad para crear belleza. Donde nadie espera nada bello como resultado de un laboratorio y de la manipulación de residuos, surge la sorpresa cuando algo así sucede.
El edificio se construye con una caja metálica hermética por necesidad, tripartida en su sentido transversal y cuatripartita en su sentido longitudinal, por decisión del arquitecto, en bandas que contienen transversalmente, almacenes y laboratorios, paso de vehículos y oficinas y servicios. Longitudinalmente se trata de un edificio, estructurado con patios abiertos que dividen las funciones desde su interior por razón de la necesidad de ventilación de las mismas, pero que sin embargo se cierra completamente al campus. Es un edificio de piel y huesos. Se construye todo él, la estructura portante y la plementería, con acero, en su mayoría galvanizado. Un acero que se coloca sobre una solera de hormigón, completada hasta el borde de la calle con una alfombra de grava.
La Sede del Servicio Municipal de Medio Ambiente en las Riberas del Ebro (Zaragoza), de los arquitectos Jaime Magén y Francisco Javier Magén, realiza una acertada lectura de un emplazamiento con un valor especial que se basa en la relación entre la ciudad construida y las riberas urbanas del río Ebro. El proyecto se sustenta en dos ideas fundamentales: una que nace de la respuesta a esta especial significación urbana y paisajística del lugar; otra que trata de expresar la relación intrínseca entre el compromiso medioambiental del proyecto, su materialidad y su programa. La relación con los espacios urbanos colindantes y las características topográficas del solar se convierten en condiciones activas de la implantación, como se aprecia en la sección del proyecto, que también pone de manifiesto la prolongación del espacio público del acceso a través de la cubierta y la configuración del edificio como plataforma-mirador hacia el Ebro.
La dotación del Premio BigMat de Arquitectura 2011 asciende a un total de 24.000 euros de los cuales 18.000 euros son para el ganador y 4.000 y 2.000 euros para el segundo y tercer premio respectivamente. La ceremonia de entrega de los Premios, a la que asistieron más de 200 invitados, tuvo lugar el 17 de junio en la ”Cidade da Cultura” de Santiago de Compostela donde se obsequió a los asistentes con la primera cena que se celebró en este emblemático marco.
Entre los proyectos distinguidos con los premios BigMat cabe destacar el Edificio Mediapro de los arquitectos Carlos Ferrater, Patrick Genard y Xavier Martí, ganador en la pasada convocatoria, “Vivienda unifamiliar en Igualada” de arquitectos Manuel Bailo y Rosa Rull y el Centro de Salud CMS San Blas, de los arquitectos María Hurtado de Mendoza, César Jiménez de Tejada y José María Hurtado de Mendoza. Otros arquitectos destacados con este galardón han sido José María Churtiaga, Cayetana de la Quadra Salcedo, Javier Arizcuren, Miguel Alonso y Lucía Ferrater.
Con esta iniciativa, el Grupo BigMat quiere afianzar su compromiso con el sector de la construcción fomentando la calidad y apostando por una rehabilitación integrada dentro del medio urbano o rural que utilice materiales propios del entorno.
El edificio de “Laboratorios y Almacenes de Reciclado Químico de la Universidad de Alcalá”, presentado por el arquitecto Héctor Fernández Elorza ha merecido el segundo premio, mientras que el tercero ha recaído en la Sede del Servicio Municipal de Medio Ambiente en las Riberas del Ebro (Zaragoza), de los arquitectos Jaime Magén y Francisco Javier Magén.
Los Premios BigMat de Arquitectura pretenden distinguir los proyectos arquitectónicos españoles más destacados y fomentar el prestigio nacional e internacional de nuestros profesionales. Están dirigido a los profesionales encargados del diseño de obras de construcción que hayan desarrollado su proyecto desde diciembre de 2005 habiendo tenido en cuenta la integración urbana y las nuevas necesidades de la sociedad de hoy en día, dentro de la arquitectura interior y exterior del edificio.
A la presente edición de los premios se han presentado casi un centenar de propuestas, provenientes de toda la geografía española, tanto insular como peninsular y con unas arquitecturas que abarcan todo tipo de funciones, desde centros médicos rurales, hasta aeropuertos, pasando por viviendas, edificios institucionales, hoteles, casinos, escuelas, centros de recogidas de residuos, paseos marítimos, piscinas, bibliotecas, etc… En resumen, edificios de toda procedencia y todo tipo de uso.
Jesús Aparicio, presidente del jurado, destaca la difícil tarea que ha supuesto la selección de los tres finalistas debido al gran número de proyectos presentados y a la gran calidad de muchos de los proyectos que han tenido que quedarse en el camino, tras intensas deliberaciones del jurado.
Los proyectos ganadores
El Conjunto proyectado por Martín Lejárraga es una actuación que va más allá de la estricta edificación, ya que el MUCAB supone un nuevo lugar de concentración social que propicia un nuevo espacio público y social a través del edificio y su entorno. Junto al río, se prolonga la intervención desde las áreas colindantes al edificio hasta la plaza anexa, unificando pavimentos y criterios de actuación, estableciendo nuevas conexiones, facilitando la accesibilidad, y potenciando el entorno en el que se interviene. Se establece así un sistema de actuación que conjuga lo urbano con lo edificatorio, teniendo como objetivos primordiales el trazado de la ribera del río, establecer nuevas conexiones, facilitar la accesibilidad, y la potenciación del entorno en el que se interviene.
Es de destacar la dificultad proyectual que supone el hecho de que el edificio concentre usos muy diversos, unos usos que acertadamente se agrupan en tres paquetes programáticos conectados por patios. Cada uno de ellos funciona tanto de manera independiente, como comunicándose entre ellos, permitiendo el solape de programas, la comunicación visual y su ocupación temporal. De esta manera el MUCAB se convierte en lugar de conexión para todos los extractos sociales de la localidad, desde su construcción, geometría, estructura y programa.
El proyecto de “Laboratorios y Almacenes de Reciclado Químico de la Universidad de Alcalá”, presentado por el arquitecto Héctor Fernández Elorza, demuestra cómo el residuo ordenado y clasificado puede ser una nueva oportunidad para crear belleza. Donde nadie espera nada bello como resultado de un laboratorio y de la manipulación de residuos, surge la sorpresa cuando algo así sucede.
El edificio se construye con una caja metálica hermética por necesidad, tripartida en su sentido transversal y cuatripartita en su sentido longitudinal, por decisión del arquitecto, en bandas que contienen transversalmente, almacenes y laboratorios, paso de vehículos y oficinas y servicios. Longitudinalmente se trata de un edificio, estructurado con patios abiertos que dividen las funciones desde su interior por razón de la necesidad de ventilación de las mismas, pero que sin embargo se cierra completamente al campus. Es un edificio de piel y huesos. Se construye todo él, la estructura portante y la plementería, con acero, en su mayoría galvanizado. Un acero que se coloca sobre una solera de hormigón, completada hasta el borde de la calle con una alfombra de grava.
La Sede del Servicio Municipal de Medio Ambiente en las Riberas del Ebro (Zaragoza), de los arquitectos Jaime Magén y Francisco Javier Magén, realiza una acertada lectura de un emplazamiento con un valor especial que se basa en la relación entre la ciudad construida y las riberas urbanas del río Ebro. El proyecto se sustenta en dos ideas fundamentales: una que nace de la respuesta a esta especial significación urbana y paisajística del lugar; otra que trata de expresar la relación intrínseca entre el compromiso medioambiental del proyecto, su materialidad y su programa. La relación con los espacios urbanos colindantes y las características topográficas del solar se convierten en condiciones activas de la implantación, como se aprecia en la sección del proyecto, que también pone de manifiesto la prolongación del espacio público del acceso a través de la cubierta y la configuración del edificio como plataforma-mirador hacia el Ebro.
La dotación del Premio BigMat de Arquitectura 2011 asciende a un total de 24.000 euros de los cuales 18.000 euros son para el ganador y 4.000 y 2.000 euros para el segundo y tercer premio respectivamente. La ceremonia de entrega de los Premios, a la que asistieron más de 200 invitados, tuvo lugar el 17 de junio en la ”Cidade da Cultura” de Santiago de Compostela donde se obsequió a los asistentes con la primera cena que se celebró en este emblemático marco.
Entre los proyectos distinguidos con los premios BigMat cabe destacar el Edificio Mediapro de los arquitectos Carlos Ferrater, Patrick Genard y Xavier Martí, ganador en la pasada convocatoria, “Vivienda unifamiliar en Igualada” de arquitectos Manuel Bailo y Rosa Rull y el Centro de Salud CMS San Blas, de los arquitectos María Hurtado de Mendoza, César Jiménez de Tejada y José María Hurtado de Mendoza. Otros arquitectos destacados con este galardón han sido José María Churtiaga, Cayetana de la Quadra Salcedo, Javier Arizcuren, Miguel Alonso y Lucía Ferrater.
Con esta iniciativa, el Grupo BigMat quiere afianzar su compromiso con el sector de la construcción fomentando la calidad y apostando por una rehabilitación integrada dentro del medio urbano o rural que utilice materiales propios del entorno.
http://www.bigmat.es
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